POEMAS DE SOLEDAD. PARTE I. Y CUANDO SALGO A FUMAR.

Y cuando salgo a fumar,

en una terraza vacia,

atisbo a contemplar muro lejano,

pero tan cercano,

que me atrae y me aplasta,

cercena mis ganas de soñar.

Y cuando salgo a fumar,

en un horizonte vacío,

Sol lejano bordando dunas efímeras,

tan lejanas...

que me envuelven y penetran,

mis ansias de escapar y vivir.

(Y es todo tan lejano,que realmente pienso que ya en India,estoy fumando como un corsario de las dunas,olvidando y pensando dormir a la intemperie,dejando pasar ese aroma de libertad,que tanta bella soledad me produce, y en cualquier lugar, soñador sin patrias ni fronteras, dormir profundamente, abrazado a bastón de peregrino, mi único amigo al que en verdad quiero, y con el que al fin de las barreras (cruzar y romperlas) caminar eternamente, estrella silenciosa del horizonte)

Y cuando salgo a fumar,

en una terraza sin fin,

atisbo a contemplar lejano,

a peregrino errante oculto tras pañuelos,

su rostro sombra sin fin,

sus carnes arenas sin fondo...